Washington, 27 mar (PL) El cariño y las atenciones maternas tienen tal impacto en el desarrollo de los hijos que incluso pueden cambiar su ADN, develó un estudio publicado, en la revista Science.
Expertos del Instituto Salk de California, en Estados Unidos, confirmaron esa hipótesis mediante un experimento con ratones.
Los investigadores observaron las variaciones naturales, en el cuidado materno entre los animales y sus crías.
Después observaron el ADN del hipocampo de la descendencia, una región del cerebro que está involucrada en la emoción y la memoria.
El equipo descubrió una correlación entre el cuidado materno y el número de copias del gen L1, descubierto hace unos cinco años y considerado «saltarín», pues son capaces de copiarse y moverse.
Según el reporte científico, los ratones con madres amorosas tenían menos copias del gen L1 y aquellos con madres negligentes tenían más copias y, por lo tanto, más diversidad genética en sus cerebros.
Al respecto, el investigador principal, Rusty Gage, consideró que los resultados del trabajo concuerdan con estudios de negligencia infantil que también muestran patrones alterados de metilación del ADN, para otros genes.
«Eso es algo esperanzador, pues una vez que entiendes un mecanismo puedes comenzar a desarrollar estrategias para la intervención», apuntó Gage.